LÁPIZ: en la que se usa principalmente lápices de mina HB, que es muy versátil, con la cual se logran trazos de diversas tonalidades. Esto resulta práctico para hacer caricaturas rápidas. Para un trabajo que requiere más detalles se usa una gama más amplia de minas, que van desde la H hasta la 4B. Con la mina H se hacen los trazos principales, que servirán de guía y serán imperceptibles en el arte final, para lograr un efecto limpio y seguro. Las minas B aportan trazos fuertes que le dan solidez al dibujo.
CRAYÓN: en esta técnica se utiliza los lápices de color de mina suave. Los más recomendables para lograr el trazo deseado son los crayones acuarelables, puesto que dejan en el papel un efecto sellado. El único cuidado que hay que tener al momento de trabajar con estos crayones es no pasar la mano sobre lo coloreado, pues se puede correr el pigmento.
TINTA: hay diversas formas de aplicar la tinta. Puede ser con canutero, pluma fuente, marcador técnico, marcador estándar o rapidógrafo. Habitualmente utilizamos marcador técnico y rapidógrafo. Hay diversos estilos: ashurado, puntillismo y trazos simples. Para que el arte final sea limpio hacemos un trazo detallado con mina H.
ACUARELA: es la técnica que exige mayor capacidad artística, pues en estos casos, un error no se puede corregir. Una buena caricatura en acuarela aprovecha al máximo el blanco del papel para lograr efector luminosos. Nuestras obras son trabajadas por capas para ir logrando, poco a poco, los efectos de volumen y profundidad necesarios para darle vida a la pieza.